La educación es uno de los pilares claves de la sociedad, alcanzar un nivel de calidad optimo es una de las metas de la humanidad para lograr el siguiente paso en la evolución como sociedad, dentro de la educación como sistema y herramienta diversos aspectos resaltan por su importancia, y el aprendizaje por experiencia es uno de ellos, ciertamente resulta imposible que las instituciones educativas se hagan cargo al 100% de la preparación de los estudiantes, gran parte del trabajo o en realidad la mayor parte del trabajo recae sobre el propio estudiante, quien basándose en sus propias experiencias debe ser completamente capaz de obtener una percepción, comprensión personal y única sobre cualquier aspecto y característica del mundo en general.
El aprendizaje por experiencia es parte de la educación, pero poco se lleva a la práctica realmente, estamos acostumbrados a un sistema de educación piramidal donde profesores y alumnos son separados por una gran brecha virtual que coloca al que imparte el conocimiento en la sima de la pirámide y al resto en el fondo, pero cada vez son más los profesionales y regiones en general que optan por un aprendizaje colaborativo, que coloca a todas las partes del sistema en un mismo nivel, el alumno aprende del maestro y el maestro aprende del alumno.
Es allí donde podemos ver un poco más de libertad que permite al estudiante hablar en base a su propia experiencia y eliminar cualquier posible bloqueo a causa de una injusta y deficiente educación que lo predispone a tomar un rol dentro de la sociedad sin siquiera saberlo. Por ello es importante que se incluya un sistema de educción más eficiente, que permita al estudiante reflexionar sobre los hechos y comprender realmente, más que adquirir conocimientos, pues no es lo mismo saber que comprender, y precisamente el aprendizaje experiencial es el sistema más adecuado para conseguirlo.